Freidoras

Guía de compra para la freidora perfecta

Si te has propuesto encontrar la freidora perfecta para tu restaurante o negocio, no puedes perderte la guía más completa que hemos preparado para ti. Conseguir unos calamares en el punto perfecto de fritura, crujientes pero jugosos en su interior, no es tarea fácil. Para ello, debes contar con una buena freidora profesional que te garantice los mejores resultados. ¿Quieres saber qué debes tener en cuenta antes de decidirte? Apunta nuestros consejos.

1. ¿Qué es una freidora? Definición y tipos

Existen ciertos elementos que no pueden faltar en la cocina de cualquier bar o restaurante y, sin duda, la freidora es uno de ellos. Se trata de un contenedor de cierta profundidad, elaborado de acero inoxidable, en cuyo interior se coloca una cesta metálica que servirá para manejar cómodamente los alimentos durante el proceso de fritura.

Esta cesta está diseñada para que los alimentos puedan introducirse en el momento exacto, cuando se alcanza la temperatura idónea del aceite. Para extraerlos, basta con sacar la cesta y colocar los alimentos en el plato para servirlos.

Toda buena cocina profesional debe contar con uno de estos electrodomésticos, la cuestión es: ¿cómo dar con el modelo más adecuado para ti? Veamos qué tipos de freidora existen en el mercado actual.

1.1  Freidoras industriales de gas

Hay dos maneras por las cuales las freidoras industriales pueden calentar el aceite: a gas o mediante electricidad. En este primer apartado veremos con más detalle el funcionamiento de las freidoras industriales de gas.

En general, los electrodomésticos a gas representan un ahorro energético frente a las eléctricas ya que necesitan mucha menos energía para funcionar. Sin embargo, no ocurre así en el caso de las freidoras. La diferencia energética es muy pequeña entre ambos tipos y las freidoras a gas suelen ser menos comunes en las cocinas profesionales.

A través de una toma de gas o conectadas a unas bombonas de butano, estas freidoras cuentan con quemadores ubicados en el exterior de la cubeta que consiguen alcanzar temperaturas elevadas rápidamente.

Según el espacio con el que cuentes en tu cocina, puedes encontrar las opciones de pie o de sobremesa. Las primeras requerirán algo más de espacio mientras que las segundas son muy fáciles de colocar, por ejemplo, en una mesa o estantería de la cocina.

1.2  Freidoras eléctricas

En el caso de las freidoras eléctricas, estas funcionan conectadas directamente a una toma de corriente.

Cuentan con unas resistencias, ubicadas en el interior de las cubetas, que son las encargadas de calentar el aceite y mantener una temperatura mucho más constante que las freidoras de gas. Esto puede resultar muy conveniente si tienes un negocio donde necesitas usar la freidora de forma continuada y se requiere mantener una temperatura elevada en todo momento.

Según su potencia, puedes encontrar freidoras monofásicas o trifásicas. Las primeras cuentan con un enchufe conectado a la toma, mientras que las trifásicas es necesario instalarlas directamente a la red eléctrica. Estas últimas son más potentes y calientan más rápido, aunque el consumo energético es mayor.

1.3  Freidoras profesionales de alto rendimiento

Son las freidoras más indicadas para restaurantes con una producción muy alta, por ejemplo, establecimientos de comida rápida.

Están diseñadas para soportar un uso muy continuo, a veces durante todo el día, y su potencia es mucho más elevada que la de otros tipos de freidora. Son capaces de freír hasta 46 kilos en una hora y algunos modelos cuentan con sistemas que evitan que los alimentos se quemen.

1.4  Freidoras a presión

Si lo que prefieres es una fritura más rápida y sana, entonces tu mejor opción es una freidora a presión.

Al igual que las anteriores, las freidoras a presión se utilizan en cocinas profesionales que necesitan elaborar grandes cantidades de alimentos fritos. A través de la presión, se consigue un gasto energético menor y la cantidad de aceite necesaria se reduce, por lo que se obtienen frituras con menos grasas.

1.5  Freidoras de aire caliente o freidoras sin aceite

Otra alternativa más sana a las freidoras convencionales son las freidoras de aire caliente, también llamadas freidoras sin aceite.

Su funcionamiento por convección es ideal para cocinar con menos cantidad de aceite, lo que resulta en una limpieza mucho más sencilla que la de freidoras con otro tipo de funcionamiento. Un ventilador es el encargado de hacer circular una corriente de aire continua, a muy elevada temperatura, que rodea los alimentos y los cocina de manera homogénea.

2. ¿Qué capacidad en litros puedes encontrar?

Existe una gran variedad de modelos en el mercado, ¡tantos (casi) como tipos de restaurantes! Uno de los aspectos al que debes prestar especial atención cuando vayas a comprar una freidora, es la capacidad. 

Piensa en el uso que vayas a hacer de este electrodoméstico, ya que variará mucho si posees un restaurante de comida rápida o si, en cambio, tienes un bar de tapas.

Estas son algunas de las capacidades que puedes encontrar:

• Freidoras de 1 litro, freidoras de 2 litros o freidoras de 3 litros: son las más pequeñas, aunque, generalmente, están destinadas para uso doméstico.

• Freidoras de 4, 6, 8 y 10 litros: son las freidoras para hostelería más utilizadas.

• Freidora doble para hostelería: cuenta con dos cubetas independientes para que puedas freír alimentos diferentes sin mezclar sabores.

3. Aspectos que debes tener en cuenta

La capacidad es un factor determinante en tu decisión de compra… pero ¿qué más debes tener en cuenta antes de decidirte por un modelo de freidora u otro? Toma nota de qué debes considerar cuando escojas la freidora perfecta para tu negocio:

• Velocidad para calentarse: si cuentas con un bar o restaurante amplio en el que debes preparar frituras de manera continua, es recomendable optar por una freidora industrial eficiente en este sentido. Así ofrecerás un servicio fluido y tus comensales no tendrán que esperar más tiempo del necesario.

• Facilidad de limpieza: los materiales o el diseño son fundamentales para facilitar la limpieza de una freidora. Apuesta por una freidora de acero inoxidable, el material resistente por excelencia, que además de asegurarte una buena limpieza, no se oxida.

• Seguridad de uso: la mayoría de las freidoras de uso profesional suelen contar con un termostato de seguridad, el cual fija una temperatura máxima que, en caso de sobrepasarse, detiene el aparato para evitar quemaduras u otros accidentes.

• Tamaño y capacidad: todo dependerá del espacio con el que cuentes en tu cocina para ubicar la freidora y del servicio que necesites dar a tus clientes. Cuentas con diferentes opciones para profesionales, desde freidoras pequeñas hasta freidoras dobles con producciones de hasta 46 kilos por hora.