Pan congelado para hostelería
El pan es uno de los ingredientes básicos de nuestra alimentación y un elemento primordial en cualquier servicio de restauración. Calcular las cantidades que se van a utilizar a lo largo de la jornada puede ser complicado porque depende de la demanda de cada establecimiento. En Makro ofrecemos soluciones a cada necesidad. Por eso, pensando en tu negocio, te presentamos una propuesta de pan congelado para hostelería que te permitirá disponer de una amplia gama de tipos de pan en tu establecimiento y controlar al mismo tiempo el escandallo.
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Preguntas frecuentes
En el caso de locales especializados en bocadillos y /o desayunos, el pan más utilizado son las barras y bollos pequeños.
El pan es un producto básico en nuestra gastronomía y, sin embargo, no todos los restaurantes le prestan la atención adecuada. Entre las opciones para que un restaurante pueda diferenciarse mediante su oferta de pan figuran:
- Elaborar su propio pan para garantizar que sea fresco y de calidad.
- Acompañar cada comida/plato con un tipo de pan diferente.
- Incorporar variedades diferentes a las más tradicionales, como pan con aceitunas, queso o frutos secos.
El pan es un producto perecedero que se estropea en un margen de tiempo breve y, por ello, es importante adoptar una serie de medidas para evitar que acabe como desperdicio. Entre las medidas para lograrlo señalar:
- Analizar el consumo promedio: realizar un estudio de cuál es el consumo medio del local y qué cantidad de pan acaba desperdiciándose para saber cuáles son las necesidades reales y si se producen cambios a lo largo del año. Por ejemplo, si es un restaurante que ofrece cenas de empresa en Navidad probablemente la demanda sea mayor en los meses de noviembre y diciembre.
- Segmentar el tipo de pan consumido: para ajustarse más a la demanda real es importante diferenciar el volumen de cada tipo de pan necesario (si son barras para acompañar pinchos, hogazas para hacer tostadas para desayunos, sin gluten para personas celíacas, etc.).
- Ofrecer diferentes opciones de tamaño a los clientes: gran parte del pan que acaba estropeándose en un local de hostelería es el que se ha puesto en la mesa y regresa a cocina a medias o sin haberlo tocado. Para evitarlo se pueden ofrecer diferentes opciones de tamaño/porciones a la clientela.
- Colocación: si optamos por piezas de pan individuales hay que colocarlas en la parte superior-izquierda del plato o bajo plato, a la altura de las copas (mejor con un platillo por debajo). Un error común es ponerlo en cualquier lugar de la mesa (o donde haya hueco).
- Cuchillos: debe cortarse con un cuchillo de sierra para evitar que se rompa la corteza y lograr rebanadas limpias.
- Usar paneras de mimbre: se desaconseja utilizar este tipo de recipiente ya que el mimbre y el trenzado dificultan su limpieza, de modo que la acumulación de migas acaba convirtiéndose en un foco de bacterias. Para evitarlo se puede colocar una servilleta entre el pan y la panera u optar por otro tipo de materiales.